Casey Paul Griffiths (académico SUD)

Doctrina y Convenios 22 habla acerca de la eliminación de los antiguos convenios en favor de “un convenio nuevo y sempiterno”. Esta es la primera vez que esta frase aparece en las revelaciones de José Smith, y sugiere una restauración más amplia de los convenios el Señor, efectivamente haciéndolos “nuevos” para nuestra época. Al mismo tiempo, el Señor establece que este convenio existió “”desde el principio””, revelando la naturaleza antigua y eterna del convenio. En los Artículos y Convenios, se reveló que el bautismo se practicaba “no solo [entre] los que creyeron después que él vino en la carne, en el meridiano de los tiempos, sino que [también entre los que] tuviesen vida eterna todos los que fueron desde el principio” (DyC 20:26). Solo unos meses después de que esta revelación le fue dada a José, también se le reveló que en la antigüedad, Adán fue bautizado (Moisés 6:52).

Más tarde, José Smith enseñó: “Dando por sentado que las Escrituras dicen lo que dan a entender y dan a entender lo que dicen, tenemos suficiente razón para seguir adelante y probar, según la Biblia, que el Evangelio siempre ha sido el mismo: las mismas ordenanzas, cuyos requisitos hay que obedecer; los mismos oficiales eclesiásticos para oficiar; y las mismas señales y frutos que vienen de sus promesas”[1]. Sin embargo, tanto en la antigüedad como en los últimos días, las ordenanzas del Evangelio deben ser realizadas por un siervo autorizado que posea el sacerdocio para poder ser reconocido por Dios.

(El minuto de Doctrina y Convenios)