“La tierra de Sion”, dice la historia de José, “no era el objeto temporal más importante del momento ante nosotros”. Satanás odia Sion y trabaja para socavarla desde todos los ángulos. Cuando José y sus acompañantes regresaron a Kirtland, Ohio, para dedicarse en Independence, Misuri, como el centro de Sion, descubrieron que “los actos de Satanás” habían llevado a muchos Santos a la rebelión. José y los Santos fieles estaban enormemente ansiosos por saber cómo establecer Sion[1].
¿Cuándo y cómo deberían reunirse en Misuri? ¿Cómo deberían encontrar a Sion y mudarse allí? ¿Qué deberían hacer con su propiedad en Ohio, como la tienda de Whitney y las granjas que pertenecen a Isaac Morley y Frederick Williams? Las revelaciones en Misuri mandaron a los Santos a comprar tierras en ese lugar. ¿Cómo deberían recaudar el dinero? A Sidney Rigdon le dieron el mandamiento de escribir una descripción de la tierra de Sion y una declaración de la voluntad de Dios (DyC 58:50). ¿Qué pensó el Señor de su primer obra? Isaac Morley ya se había mudado a Misuri y varias familias que vivían en su granja planeaban seguirlo tan pronto el Señor les dijera que fueran. Dado que José, Sidney Rigdon y sus familias vivían en la granja de Morley, venderla los dejaría sin hogar. ¿Dónde deberían vivir?
La sección 63 aborda la apostasía y estas preguntas urgentes relacionadas literalmente con edificar Sion. Esta revelación motivó varias acciones. José comenzó a discernir por el espíritu, a los que debían trasladarse a Sion[2]. Como se ordenó, Titus Billings y varios otros Santos de Kirtland se mudaron a Misuri en la primavera de 1832. Sidney Rigdon se resignó y reescribió una descripción de la tierra de Sion basándose más en esta revelación y en otras anteriores[3].
Oliver Cowdery y Newel Whitney lo usaron para obedecer la orden de
ir de un lugar a otro, de Iglesia en Iglesia predicando y exponiendo las Escrituras y los Mandamientos (es decir, las revelaciones recientes) para obtener dinero de los discípulos, con el propósito de comprar tierras para los santos de acuerdo con los mandamientos. Los discípulos realmente abrieron sus corazones.
Oliver Cowdery y John Whitmer llevaron el dinero al obispo Partridge y Sidney Gilbert en Misuri, “y así se compraron tierras para la heredad de los Santos”[4].
Como se les mandó, Newel Whitney y Frederick Williams conservaron su propiedad en Kirtland y lo consagraron a la Iglesia. En cuanto a José, Sidney Rigdon y sus familias, se mudaron al sur de Hiram en Ohio, en septiembre de 1831, donde Elsa y John Johnson les ofrecieron un hogar. Sí, hubo apostasía — adulterio, mentira, hipocresía, rebelión — en Kirtland, cuando el Señor dio la sección 63. También hubo un importante edificio en Sion en respuesta a esto.
[1] “History, 1838–1856, volume A-1 [23 December 1805–30 August 1834]”, pág. 127, The Joseph Smith Papers, consultado el 2 de septiembre de 2020.
[2] D&C 63:41. La Biblioteca de la Historia de la Iglesia, tiene una revelación inédita escrita a mano por John Whitmer, fechada el 31 de agosto de 1831, que dice: “He aquí, dice el Señor por la voz del espíritu, me es prudente que mi siervo John Burk David Eliot Erastus Babit hagan su viaje de este otoño a la tierra de Sion”.
[3] Sidney Rigdon Papers, Church History Library. Publicado en Cook, Revelations of the Prophet Joseph Smith, 99–101.
[4] “John Whitmer, History, 1831 – circa1847”, pág. 10, The Joseph Smith Papers, consultado el 28 de septiembre de 2020.
Del minuto de Doctrina y Convenios
Del 19 de junio al 27 de agosto de 1831, José Smith estuvo fuera de Kirtland, Ohio, mientras viajaba hacia y desde Independence, Misuri, para identificar la ubicación de la ciudad de Sion (DyC 57–62). Al regresar de su viaje a Sion, José enfrentó varias decisiones. Más tarde señaló en su historia: “Muchas cosas ocurrieron en este viaje para fortalecer nuestra fe, y que demostraron la bondad de Dios de una manera tan maravillosa”. También señaló “que no pudimos evitar contemplar los esfuerzos de Satanás para cegar los ojos de la gente a fin de ocultar la luz verdadera que ilumina a todo hombre que viene al mundo” [1]. Aunque la difícil expedición fortaleció la fe de muchos, algunos de los ancianos que fueron al viaje se quejaron y avanzaron rápidamente hacia la apostasía. Mientras tanto, algunos de los miembros de Kirtland también se habían apartado. John Whitmer señaló: “Los élderes habían regresado a sus hogares en Ohio, las iglesias necesitaban mucha exhortación[;] en ausencia de los élderes, muchos apostataron”[2].
Ahora, una vez identificada la ubicación de la ciudad de Sion, surgió otra cuestión apremiante. Muchos miembros de la Iglesia deseaban partir a Sion de inmediato, y José y los demás líderes de la Iglesia se enfrentaron al dilema de encontrar la mejor manera de organizar la migración a Misuri. José registró más tarde: “En estos días de la infancia de la Iglesia, había un gran anhelo de recibir la palabra del Señor concerniente a todo asunto que de alguna manera se relacionara con nuestra salvación; y por ser la tierra de Sion el objeto temporal más importante del momento ante nosotros, le pedí al Señor más información sobre el recogimiento de los santos, la compra de terrenos y otros asuntos, y recibí lo siguiente [DyC 63]” [3].
Véase “Historical Introduction”, Revelation, 30 August 1831 [D&C 63].
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